Una unión bancaria para Europa

Una unión bancaria para Europa

La supervisión común de los bancos de la UE protegerá mejor los depósitos, restaurará la confianza y contribuirá a amortiguar las sacudidas del sector financiero, pasos esenciales para sacar a Europa de la crisis.

La crisis económica y financiera ha demostrado que el sistema bancario de la UE es vulnerable. Los problemas de un banco pueden propagarse rápidamente a otros y afectar a depósitos e inversiones y a todos los aspectos de la economía.

Frente a esa situación, la UE y sus Estados miembros han tomado medidas para fortalecer la supervisión del sector financiero. Una de las reformas consistió en la creación, el año pasado, de tres autoridades europeas de supervisión para coordinar el trabajo de los reguladores nacionales y garantizar que las normas de la UE se aplican de manera coherente.

Pero se puede hacer aún más para garantizar la estabilidad financiera. El presidente de la Comisión, José Manuel Durão Barroso, pide una unión bancaria que restablezca la confianza en los bancos y el euro y sea un primer paso para una integración económica y fiscal a largo plazo. Los elementos principales de la unión bancaria serían:

  • Normas europeas para los bancos: condiciones comunes, aunque flexibles, sobre la cantidad de capital que los bancos deben poseer.
  • Un único supervisor bancario de la UE, con supervisión directa de los grandes bancos y de los bancos que operen en varios países, para hacer que se cumplan las normas y comprobar el control de riesgos
  • Normas comunes para evitar quiebras de los bancos y para intervenir cuando un banco tenga problemas financieros, antes de recurrir a rescates financiados por los contribuyentes
  • Un sistema único de garantía de depósitos para proteger a los depositantes en cualquier banco de la UE donde tengan ahorros e inversiones y fortalecer de paso la confianza en el sistema bancario

La Comisión ya ha presentado propuestas sobre algunos de los elementos esenciales para la unión bancaria. Entre ellos se encuentra una Directiva para facilitar que los países de la UE y sus normativas nacionales respondan rápida y eficazmente ante una crisis bancaria.

Próximas etapas

La Comisión tiene previsto hacer otras propuestas, como un fondo común de rescate bancario, medidas en caso de quiebra de bancos y mayor coordinación de las políticas fiscales y de gasto.

Los dirigentes de la UE debatirán las propuestas para una unión bancaria y fiscal durante su reunión de los días 28 y 29 de junio.

Fuente: Comisión Europea